¿Qué son las plataformas OTT?

Cómo funcionan las plataformas OTT

Es muy probable que hayas escuchado sobre las plataformas OTT, pero todavía no sepas que son en realidad, a pesar de que las usas a diario.

¿Te suenan Netflix o Amazon Prime Video? Pues bien, son algunos ejemplos de opciones OTT sobre las que te queremos hablar en este post, ya que hay una creciente demanda por consumir los contenidos en modo digital, dejando atrás a las opciones tradicionales como la televisión.

Qué es una plataforma OTT

OTT son las siglas en inglés de Over The Top “por encima de la media”, “por encima de todo” o “por encima de lo normal”.

Se tratan de aplicaciones que brindan contenido de video a través de internet, en lugar de televisión por cable o satélite.

Permiten transmitir de forma instantánea vídeos en dispositivos móviles (smartphones y tablets), web y televisores a través de dispositivos como Chromecast, Apple TV Amazon Fire TV, así como Smart TVs.

En efecto, todo lo que el usuario necesita para acceder al contenido es una membresía o suscripción al servicio y una conexión a Internet.

La OTT es de gran utilidad porque los usuarios no pierden tiempo descargando archivos, ya que todo el contenido ha sido subido a los servidores web.

Lo mejor es que ofrecen diversos planes económicos en función de diferentes criterios. Adicionalmente, se puede compartir la cuenta, lo que economiza el coste de la suscripción.
El contenido que ofrecen estos canales es muy variado, va desde el audiovisual como series, películas y documentales, hasta plataformas especializadas con temas deportivos o musicales.

Cómo funcionan las plataformas OTT

Como ya mencionamos, los servicios OTT presentan una amplia gama de contenidos, desde películas, programas de televisión, música y radio. Para acceder a ellos debe ser a través de sitios web y aplicaciones.

Existen varios modelos de negocio OTT. Por ejemplo, el modelo EVoD (EVoD publicitario) que muestra contenido de vídeo gratis, pero llevan anuncios publicitarios.

También está el modelo SVoD (VoD de suscripción) que entrega acceso a los contenidos por un lapso establecido. En este modelo, el usuario paga una membresía y escoge cualquier contenido del catálogo del proveedor.

Mientras que con el modelo EST (venta electrónica), los usuarios obtienen una copia digital del contenido y con el TVoD alquilan películas y programas de televisión (el acceso al material se proporciona durante varios días).

Por lo general, la transmisión OTT se considera extremadamente flexible y versátil. Sin embargo, cuenta con algunas limitaciones.

Una de ellas es que puede ser complicado adaptarse a las diferentes redes y dispositivos para proporcionar contenido a través de Internet.

En cuanto al rendimiento de una transmisión OTT depende de una serie de factores, que incluye el ancho de banda disponible, la velocidad de conexión a Internet y la funcionalidad del dispositivo de visualización que el usuario utiliza.

Uno de los trucos que aplican algunas plataformas y servicios OTT para disminuir los problemas con las conexiones de red es permitir que las personas adecúen la calidad de la transmisión, ya sea bajando la resolución para adaptarse a un dispositivo con menos ancho de banda.

¿Cómo se monetizan estas plataformas?

Hay tres modelos conocidos para la monetización de las plataformas OTT.

No podemos asegurar que un método es mejor que el otro. Al final, cada uno satisface la variedad de necesidades que hay en el mercado.

La lógica dice que lo ideal es probar cada método y seleccionar el que recaude la mayor cantidad de dinero.

Por lo tanto, si quieres cobrar una suscripción y además poner anuncios lo puedes hacer, toma nota de cada opción:

Suscripción de video bajo demanda (SVOD). Con esta modalidad el espectador tiene acceso a una serie de contenidos por una tarifa recurrente, que puede ser mensual, semestral o anual. Los usuarios cuentan con control total sobre la suscripción y deciden cuándo iniciar o finalizarla.
Basada en publicidad (AVOD). El contenido se ofrece de forma gratuita, pero con monetización a través de la publicidad en video. Los anunciantes son los que pagan por lo general cada mil impresiones
Video transaccional bajo demanda (TVOD). Los consumidores compran contenido en forma de pago por visión. Los servicios de TVOD ofrecen productos de lanzamiento o contenidos premium puntuales, que no necesitan un coste recurrente.
Redes de publicidad en video. Una de las formas más efectivas y rápidas de generar ingresos de su OTT es unirse a una red de publicidad en video (VAN).

Una de sus desventajas es que se pierde el control sobre el tipo de anuncios que se muestran en la plataforma. Su utilidad está en que no necesitas encontrar patrocinante por tu cuenta, así que asegúrate de analizar los VAN que está considerando y revisa la letra pequeña antes de firmar.

Publicidad directa. Permite controlar los tipos de anuncios que exhiben en su plataforma OTT. Para esto, necesitas desarrollar un servidor de anuncios personalizado.
Al optar por la publicidad directa debes buscar anunciantes, negociar con ellos y definir sus tarifas. Aunque es mucho trabajo desde el punto de vista empresarial como del desarrollo, tienes la alternativa de obtener mejores rendimientos porque no hay intermediarios.
Ofertas de patrocinio. El acuerdo implica que una marca pague por el derecho a anunciar un contenido en específico.
Hay muchas maneras de hacerlo, por ejemplo, puede incrustarlo en el contenido, mostrarlo como anuncios publicitarios o en la pantalla de inicio.

También facilitar la rotación de los anuncios porque solo tienes que llevar a cabo algunas marcas de patrocinio.

Ventajas de las plataformas OTT con otras de contenidos

Los mayores beneficios de las soluciones OTT son:

Variedad. Los proveedores de contenido satelital, IPTV y por cable tienen limitaciones en sus catálogos y paquetes, mientras que los servicios OTT proporcionan acceso a una amplia gama de opciones de material original y con licencia.
Asequibilidad. Su suscripción es menos costosa que pagar por los métodos tradicionales de visualización de televisión. La mayoría de los usuarios modernos están dejando a un lado las transmisiones comunes para combinar varias soluciones OTT.
Mayor libertad. Los usuarios tienen control total sobre el contenido que ven y cuándo lo ven. Incluso hacen pausas, rebobinan y avanzan de forma rápida que miran y eligen entre una variedad de dispositivos para acceder a los videos.
Menos publicidad invasiva y mayores anuncios de interés. Los espacios publicitarios con los que cuentan las plataformas OTT son menores si se compara con la televisión tradicional.
Tiene múltiples opciones de monetización. Si quieres monetizar en las plataformas OTT puedes crear un modelo basado en suscripción, transacciones u ofrecer pagos únicos.
También está la alternativa de implementar tarifas adicionales para funciones extras, como la posibilidad de acceder a contenido premium antes de lo previsto.

En efecto, la demanda de una plataforma de transmisión con la capacidad de entregar contenido a través de una variedad de canales y plataformas aumentará en el futuro.

Los españoles ya no consumen la televisión como antes, cuando daban prioridad al canal por encima de los programas.

Ahora, siguen y buscan los contenidos que les interesan independientemente de la plataforma, canal o medio en el que se emitan. Un cambio que permite, además, que los productos se personalicen, se mejore la calidad del servicio y se amplíe la visualización a través de múltiples dispositivos.

La clave está en pensar detenidamente qué tipo de contenido prefieren los consumidores, de modo que pueda llegar a ellos. En la actualidad, las personas siguen y buscan lo que les interesa independientemente de la plataforma que lo emita.